Está conformado por históricas poblaciones
donde se explotaron inmensos yacimientos de oro y plata. Cuenta con un importante patrimonio arquitectónico.
Su gastronomía es muy variada, es una cocina muy rica en sabor y aroma; entre sus platillos encontramos las
Corundas michoacanas, los uchepos, la sopa purépecha, la crema fría de aguacate, la sopa tarasca, sopa
prehispánica y los tamales de harina con atole negro, entre otros.
Es un maravilloso estado que conserva su
sabor colonial y riqueza histórica como la Basílica de Nuestra Señora de la Salud, Paracho y Santuario de
las Mariposas Monarca entre otros.